HISTORIADE VILLAGONZALO PEDERNALES
El municipio de esta Villa burgalesa dista una legua (una hora de andadura) al sursuroeste de la capital provincial. Se halla situada a una altura media de 900 metros y su terreno está asentado en formación geológica del mioceno terciario, siendo llano y elevándose suavemente hacia el despoblado de S. Andrés de Perdernales y la carretera que lleva a Arcos. Las cotas más prominentes se hallan en el paraje alto de Las Canteras… Los primeros pobladores de pueblos ibéricos en estas tierras pertenecieron a las tribus de los Turmogos.
En la alta Edad Media (siglo X) se ubicaba dentro del obispado de Muñó, fundándose aquí el monasterio dúplice (varones y mujeres) de San Julián de Pedrenales, que perviviría hasta la reforma cisterciense, desapareciendo en el siglo XIII; convirtiéndose entonces sus heredades en lugar de abadengo del monasterio de Las Huelgas Reales de Burgos y S. Pedro de Cardeña, y otra parte como servidumbre de la Iglesia catedral burgalesa. Situación que se sostuvo hasta la desamortización, primero de Mendizábal (1835) y la definitiva de Madoz (1856), reinando Isabel II… Así mismo, como apunta el libro Becerro de Behetrías (1354) este lugar fue repoblado por Alfonso García de Gorias y donado posteriormente a sus sucesores.
En la alta Edad Media (siglo X) se ubicaba dentro del obispado de Muñó, fundándose aquí el monasterio dúplice (varones y mujeres) de San Julián de Pedrenales, que perviviría hasta la reforma cisterciense, desapareciendo en el siglo XIII; convirtiéndose entonces sus heredades en lugar de abadengo del monasterio de Las Huelgas Reales de Burgos y S. Pedro de Cardeña, y otra parte como servidumbre de la Iglesia catedral burgalesa. Situación que se sostuvo hasta la desamortización, primero de Mendizábal (1835) y la definitiva de Madoz (1856), reinando Isabel II… Así mismo, como apunta el libro Becerro de Behetrías (1354) este lugar fue repoblado por Alfonso García de Gorias y donado posteriormente a sus sucesores.
En época moderna este señorío fue heredado por el conde de Villariezo , cuyos privilegios le fueron confirmados por S. M. Fernando VI en Aranjuez el 18-IV-1746…
Otra referencia para el estudio y descripción histórico-geográfica de Villagonzalo Pedernales la hallamos en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid, donde se encuentran bien conservados al menos 4 documentos de planos y mapas. Los dos primeros en papel y tinta sepia, son los proyectos de traza de las bóvedas de su templo y dependencias de éste diseñadas por el gran arquitecto Juan de Vallejo; por los pleitos civiles incoados contra él por la Iglesia y Concejo en 1538 y 1552. Otros dos corresponden a un lienzo de 1758 y un papel trabajado en acuarela y tinta de 1761 en los que se dibujan mapas con la descripción topográfica, caminos y términos de la Villa; testimonios de un pleito entablado entre el conde de Villariezo y el marqués de Villareal de Buniel, sobre deslinde de posesiones en la juridición de Villagonzalo Pedernales.
Hay personajes de esta Villa que aparecen en listas de censos, compras y ventas de casas y heredades, en legajos de Ordenes Religiosas; por ejemplo en los correspondientes al convento de la Santísima Trinidad extramuros de S. Gil en la ciudad de Burgos, ya en el siglo XIV; depositados hoy en el Archivo Histórico Nacional de Madrid.
Respecto al elenco de FUENTES DOCUMENTALES DE VILLAGONZALO PEDERNALES, que han ido recopilando el discurrir de sus gentes por la historia y que dan razón de su protagonismo y relevancia, son en síntesis las siguientes:
Los Libros Parroquiales, conservados en el Archivo Diocesano de Burgos. Los del Archivo Municipal, que ha ido atesorando la memoria de su tiempo
La relación de las 40 respuestas generales del Catastro de Ensenada, exigidas a la Villa en tiempos de Fernando VI (1752); se hallan como una excelente descripción de media docena de folios manuscritos, en el Archivo Histórico Provincial de Burgos, dando cuenta de la vida del pueblo en una época de franco crecimiento
Otro relato de época es el referido a la encuesta de las 15 preguntas pedidas por el geógrafo de S. M. Tomás López, y enviadas desde Villagonzalo Pedernales el 25 de junio de 1796, que se conservan en la Biblioteca Nacional de Madrid (Burgos y su Provincia: manuscrito nº 7296), que sin embargo se despachan en solo 15 líneas de tono sombrío.
La del historiador y después ministro de Hacienda Pascual Madoz, en su famosa recopilación Diccionario de España y sus posesiones de Ultramar (edición de 17 volúmenes), confeccionada después de la Exclaustración y posterior Desamortización de 1836; publicada en 1849, en el que se describe la realidad de la Villa con un timbre de moderado optimismo.